“Se sacan chispas con las brasas”, dijo sonriendo un asistente a alguno de los múltiples convites de Fin de Año por estos días. Sin embargo, tanto las 4 entidades que lo hicieron en el garden del propio edificio de la Rural, como el IPCVA que esta vez optó por sus altísimas oficinas vidriadas en el piso 23, con vista de más de 180º a la ciudad, optaron por el: ¡¡asado¡¡.
Obvio que esa no fue la novedad tratándose del sector agropecuario, sino que parece haber aparecido una nueva competencia no ya por el producto (que no tiene objeciones), sino por los “maestros asadores” donde el reconocido “Chuchu” Borsalino, y Cristian Petersen y sus clásicos hornos, parecen llevar la delantera.
